Para 1910, Alfredo Jahn observaba que todavía existían “trozos de nieve perpetua”, en los picos El Toro, El León y Mucuñuque. Ya no eran glaciares, aunque sí lo fueron cierto tiempo atrás. Desaparecerían después los glaciares de La Concha y del Bolívar. En nuestra época, el Humboldt ha perdido la grandiosidad del glaciar que compartía con el pico Bonpland.
Lo que queda en el Humboldt no es un glaciar, y deberíamos declararlo oficialmente muerto, rezaba un titular de uno de nuestros recientes posts. Esto causó cierta conmoción, que algunos manifestaron en sus comentarios. Algunos pidieron evidencias científicas y hasta trabajos publicados que corroboraran tal aseveración. Aunque no es nuestra costumbre llenar de referencias nuestros posts, siempre hemos tenido basamentos firmes y comprobables para lo que afirmamos. Así que este post va en respuesta a nuestros queridos seguidores que se cuestionan que haya desaparecido “la última joya de La Corona”, como nosotros denominamos aquí al extincto glaciar del Humboldt. Y las referencias en las que nos basamos las podrán encontrar en el primer comentario.
Lo cierto es que la muerte del glaciar ya se había pronosticado desde hace tiempo. Para octubre de 2017, por ejemplo, varias fuentes se hicieron eco de investigaciones científicas en nuestra Última Joya de La Corona y empezaron a hablar de “la muerte del glaciar del Humboldt”. El retroceso glacial que lo llevó a esa condición comenzó hace mucho tiempo. Así, durante el último Máximo de Glaciación, hace más de 20.000 años, el área total de glaciares en las sierras merideñas se estimó en unos 200 km2. El glaciar de mayor tamaño cubría el área de los picos Bolívar y Humboldt-Bonpland, y fue estimado en unos 50 km2. En los últimos 100 años este retroceso ha sido más acelerado.
De los 10 glaciares que había en la Sierra Nevada de Mérida en 1952, para 1998 cuatro habían desaparecido casi completamente y uno se habia desintegrado en parches de rehielo, mientras que los restantes cinco eran sustancialmente pequeños. Para ese año el área de glaciares en el macizo de La Corona era de 2,03 km2. Para el 2008 le calcularon un área de 1,7 km2. Entre 2009 y 2011 el glaciar del Humboldt se redujo a unos 0,1 km2 (Braun y Bezada, 2013), lo que equivale a unos dos estadios de fútbol.
Ahora bien, ¿cuál es el criterio de tamaño mínimo para un glaciar? Aunque no hay un estándar global para qué tamaño mínimo deba tener un cuerpo de hielo para ser considerado un glaciar, científicos del Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS, por sus siglas en Inglés), consideran que es 0,1 km2 (¡el mismo tamaño que tenía el glaciar del Humboldt en el 2013!). Se estima que por debajo de este tamaño el hielo está generalmente estancado y no tiene suficiente masa para moverse.
Por criterios del tamaño remanente y las características físicas de la masa de hielo que no se desplaza y que se está derritiendo, el glaciar del Humboldt puede considerarse extincto. Quizás desaparezca de nuestra vista antes de que sea declarado oficialmente muerto.
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Texto: Enrique La Marca
Referencias consultadas:
(1) Jahn, A. 1925. Observaciones glaciológicas en los Andes venezolanos. Cultura Venezolana 64.
(2) Schubert, C. 1992. The glaciers of the Sierra Nevada de Mérida (Venezuela): a photographic comparison of recent deglaciation. Erdkunde 46:58-64.
(3) Schubert, C. 1998. Glaciers of Venezuela. En: Satellite Image Atlas of Glaciers of the World - South America. USGS Professional Paper 1386-I.
(4) Stansell, N., et al. 2005. Late Quaternary deglacial history of the Mérid Andes, Venezuela. Journal of Quaternary Science 20(7–8):801–812
(5) Carrillo, E. y S. Yépez. 2010. Evolución de los glaciares en los Andes venezolanos: glaciares de los picos Humboldt y Bonpland. Colección Glaciares, Nevados y Medio Ambiente. INGEOMINAS, Instituto colombiano de Geología y Minería. Bogotá, Colombia.
(6) Braun, C. Y M. Bezada. 2013. The history and disappearance of glaciers in Venezuela. J. Latin American Geography 12(2):85-124.
(7) Peñaloza-Murillo, M.A. 2017. Cuando las “Cinco Águilas Blancas” levantaron el vuelo: el descongelamineto de los glaciares merideños. UNAVISIÓN: Revista del Centro Local Carabobo. Universidad Nacional Abierta, 6 (ed. Especial).
(8) The Americas. 2017. The death of Venezuela’s Humboldt Glacier. The Americas, Oct. 5th, 2017.
(9) Francou, B. et al. (S/f). Glaciares de los Andes Tropicales víctimas del Cambio Climático. Comunidad Andina, Secretaria General; PRAA e IRD. 99 pp.